Tiene unos gráficos muy bonitos y muy buenas ideas pero tras un par de horas el juego se hace muy pesado. El sistema de cámaras es pésimo, y los edificios son enormes, lo que te obliga a construir enormes ciudades que lo único que hacen es marearte, perderte en tu propia ciudad y provocar desabastecimiento de recursos a la población. Además, el sistema para "plantar" los edificos está fatal hecho y cuesta bastante conseguir que las calles sean rectas
Me gusta más Faraón, un juego que ya tiene sus años pero, para mí, el mejor juego de gestión de ciudades
Lo llego a saber y no me lo compro
