Siguiente paso.
Una vez hemos terminado el terreno de todas las peanas, llega el momento de organizarlo todo para que no haya errores. Esto es especialmente importante si vives en una casa pequeña sin un sitio predefinido para el hobby, y además hay tres niños pequeños que lo que más les gusta es hacer peleas con bolas de milliput…
Al final, estamos hablando de siete peanas, cada una con cuatro figuras y cada figura va en un sitio concreto, por lo que yo lo he organizado de la siguiente manera.
1. A cada peana de cuatro le asigno un “tenedor” de plástico donde van a ir colocadas las cuatro figuras de esa peana. No solo van a ir solo esas cuatro, sino que además van en orden. La figura más cercana a los pinchos del tenedor, es la que está situada más a la izquierda dentro de la base.
2. Para identificar cada tenedor con su base, escribo el mismo número tanto en el tenedor, como en la parte de debajo de la peana. De esta manera, todo está organizado y no hay margen de error.
A la hora de pegar las figuras al tenedor, he usado el superglue de toda la vida pero con un matiz. La primera tanda pegué directamente la figura al tenedor, pero es algo complicado, puesto que por muy rápido que sea el pegamento la superficie de contacto es pequeña y al final tienes que estar un buen rato haciendo presión. Además en la mayoría de los casos, entre el tembleque de la mano y que se seca el pegamento, no termina de pegarse bien.
Solución: Yo hice pequeñas bolitas (muy pequeñas) de milliput, aunque supongo que cualquier masilla para modelar valdría, de tal modo que a la hora de pegar cada figura, pongo una gota de pegamento en la bota de la figura y otra en el tenedor. Cogo la figura, presiono con la bota que tiene el pegamento sobre la bola de masilla, y luego sobre el tenedor. De esta manera el proceso es rapidísimo, porque gracias a la masilla se incrementa la superficie de contacto y en seguida se queda la figura firme sobre el tenedor.
Aunque algo desenfocada, aqui se puede ver la bolilla de masilla
Pronto más...